La iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación es una joya arquitectónica, situada en una de las colinas de la ciudad de Asunción. La edificación no presenta características arquitectónicas similares a otras de Paraguay y fue diseñada a modelo de las catedrales del Renacimiento. El monumento posee un estilo romano-corinto, llevada a cabo a finales del siglo XIX. Es uno de los templos católicos más grandes de Asunción.
La iglesia de la Encarnación y Colombo
Finalizada la Guerra del 70, en medio de la depresión y la miseria en Paraguay, se destacó la labor de un joven italiano, Juan (Giovanni) Colombo, proveniente de Milán. Con 22 jóvenes años llegó al Paraguay y formó parte del ejército al servicio de López en la guerra. Terminada la contienda, se asentó en Asunción. Trabajó en la terminación y decorado del Hotel Hispano Americano, palacio que perteneciera a Benigno López (obra de su connacional Alessandro Ravizza). A su vez, diseño la columna conmemorativa a la Constitución del ’70, monumento inaugurado en 1873. También intervino en las refacciones al Palacio de López que, desde 1894, se constituyó en la sede del Gobierno Nacional.
Pero su obra cumbre fue la elaboración de los planos para la construcción de la Iglesia de la Encarnación. El templo fue una de las primeras iniciativas emprendidas por los López para el hermoseamiento de Asunción, antes de la contienda contra la Triple Alianza. El mismo sustituiría a una de las primeras iglesias de la colonia, la del Convento de Santo Domingo consumida en un incendio desatado el 4 de enero de 1889. Con la iglesia aún en llamas, el presidente de la República, general Patricio Escobar (1886-1890) cooperó en sofocar el fuego y evaluar las pérdidas. El arquitecto italiano prometió al presidente elaborar los planos del nuevo templo sin recibir remuneración. Solo solicitaría los materiales para construirla.
Estructura y estilo arquitectónico
Colombo comenzó el templo de la “nueva Encarnación” en el año 1893. Debido a su muerte la obra quedó inconclusa, y fue inaugurada en 1912. Al imponente monumento le faltan sus torres en cada extremo que, según lo proyectado, debían superar en altura a la cúpula. Por dentro posee un estilo basilical que culmina en el altar mayor. Su interior se halla iluminado por 41 de las 66 ventanas ubicadas en tres diferentes niveles. Cuenta con siete grandes puertas, tres en el acceso frontal, dos en el transepto y dos más en el punto medio de los muros laterales. La edificación posee accesos directos por tres lados, e indirectos por la sacristía ubicada hacia el sur. Por un lado, el templo dispone de un cuerpo y un ábside propio de la planta basilical paleocristiana y, por el otro, el crucero que recién aparece en la basílica constantiniana.
Si bien sufrió cambios, éstos no modificaron en nada su funcionalidad y espacialidad. Su planta es de cruz latina, con una nave central y cuatro laterales (dos a cada lado). Es el único templo con estilo basilical en Asunción. Las naves laterales comunican a las 12 capillas destinadas a distintos santos. Las 12 columnas destinadas al sostén del templo representan a los 12 apóstoles. Dichas columnas son troncónicas de base toscana y capitel campaniforme y están unidas por arcos. Los muros que podemos notar a la entrada de la iglesia tienen como un metro de espesor, construidos así para evitar el deterioro con el paso del tiempo.
Asentamientos previos a la ubicación actual
El Poder Legislativo, en 1992, declaró al templo de la Encarnación “Monumento Histórico Nacional”. La iglesia de la Encarnación tuvo la peculiaridad de haber tenido varios asentamientos previos al lugar y al templo que hoy conocemos.
El primer asentamiento data desde 1539 hasta 1543. Estaba ubicado en la barranca de la bahía. Según relato de Félix de Azara, la edificó el capitán Domingo Martínez de Irala. El Segundo asentamiento fue de 1543 a 1697, los relatos señalan que el gobernador Alvar Núñez Cabeza de Vaca ordenó la reedificación, en el lugar donde se hallaba anteriormente la casa fuerte. El Tercer asentamiento fue desde 1697 hasta el año 1797 por disposición del Cabildo. La edificación estaría ubicada en la altura de la calle Palma, donde se encontraba una capilla en ruinas levantada en homenaje a Santa Lucía.
El cuarto asentamiento fue de 1797 a 1818), según los planos de Ramón de César de 1797, frente a la bahía. Quedó ubicada sobre las calles la Encarnación (hoy 15 de agosto) y Presbítero Hernández (Palma). El su quinto asentamiento, en 1818: después de un derrumbe y se trasladó nuevamente al Convento de los Dominicos en la calle 15 de Agosto y calle República. Esta nueva construcción fue destruida por un siniestro ocurrido en la mañana del 4 de enero de 1889. El sexto asentamiento es el actual. Desde 1889 hasta la actualidad, quedó implantado sobre una de las siete colinas de Asunción, la “Loma Volo Cue”. Es su última y definitiva ubicación, sobre las calles Pilcomayo (hoy Eduardo Víctor Haedo) entre 14 de mayo y Humaitá.
La iglesia de la Encarnación en la actualidad
La conservación del templo corresponde al estado paraguayo por ser patrimonio Histórico Nacional. Sin embargo, la feligresía ha sido la gran protagonista en esta labor. Varias actividades realizadas como cenas, rifas y otras para ayudar al costeo de la manutención de la única iglesia con estilo basilical.
El reloj, un icono de la iglesia, parado por más de 50 años, actualmente funciona de vuelta por iniciativa de la comunidad. El imponente órgano a tubos de origen alemán también fue afectado por el paso del tiempo y la falta de uso. El instrumento hoy por hoy vuelve a deleitar con sus melodías tras un año de restauración en Alemania. El gobierno dispuso un presupuesto para renovar la lumínica, el sistema del cableado y el equipo de sonido. Este último será traído directamente desde Italia.
Foto de portada: Facebook FLASOG.
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